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Optimus Alive ’11 (viernes 8 de julio)

Si bien tanto la jornada del miércoles como la del jueves, habían tenido, en mayor o menor medida, un claro favorito, el viernes en cambio la cosa se presentaba más reñida, y así lo fue.

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A las 5 de la tarde abrían el escenario Super Bock los brasileños Massay. Hay cosas que no acabo de entender. ¿Qué necesidad hay de poner, sólo por cubrir más horas de conciertos, a unos brasileños tratando de imitar a Glassjaw en portugués a las 5 de la tarde? Los que estábamos allí presentes esperábamos la hora de Friendly Fires, nada más. Se les veía ilusionados y acabaron con versión de «Killing in the Name» de Rage Against the Machine. Viva la originalidad. Me puse los tapones en los oídos y a vivir.

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Hay equipos que salen al campo a jugar, pero los Friendly Fires son de los que salen siempre a ganar. Su líder, Ed Macfarlane, no paró de moverse y bailar (este chico baila como nadie) en toda la hora que duró su concierto. Presentaban «Pala» (2011), su segundo disco, ideal para ponérselo todas las noches de verano y bailar en la playita. Así, pudimos escuchar temones como «Blue Cassette», «Live Those Days Tonight» o «Hawaiian Air». Además de las proyecciones, el trío se hacía acompañar de bajista, saxofonista y trompetista, lo que daba a su directo una mayor fuerza de la que ya tienen de por sí sus temas. Macfarlane se bajó en más de una ocasión a cantar entre el público y nos tuvo a todos bailando y botando todo el rato.

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También cayeron, por supuesto, muchas canciones de su debut, entre ellas hits como «Jump in the Pool», «Skeleton Boy», «Lovesick», «On Board» o «Paris», que quizás fuesen, si cabe, aún más coreadas y bailadas que sus nuevas composiciones. Y es que su concierto fue la mayor fiesta de todo el festival. Los Friendly Fires lo dieron todo y Macfarlane chorreaba litros de sudor al final del concierto. Como fin de fiesta, el maravilloso «Kiss of Life», con el que todos bailamos como locos tratando de seguirles el ritmo. De lo mejor del viernes y de todo el festival, sin duda.

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Necesitábamos tomar el aire y reponer líquidos después de aquello. Volvimos para asistir a las últimas canciones de Angus & Julia Stone. Sobre un fondo estrellado y con la luna presente, los australianos presentaron su propuesta folk para un público que ya esperaba a los Fleet Foxes. Se dejaban escuchar, sin más.

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Los norteamericanos Fleet Foxes no parecen seres de este mundo. Cuando Robin Pecknold comenzaba a cantar, todo el mundo dejaba de aplaudir y sólo se escuchaba su maravillosa voz dentro de la carpa. Eran uno de los grupos que más ganas teníamos de ver y eso se notó, ya que el publicó llenó la carpa totalmente. Con nuevo y flamante disco bajo el brazo, «Helplessness Blues» (2011), empezaron el concierto con «Grown Ocean», última canción del disco y primer single. Desde entonces alternaron canciones de su debut y de su nuevo trabajo, siendo las primeras las que más aplausos arrancaron del público. Lo cierto es que además de ser más jóvenes de lo que aparentan por sus barbas (Pecknold tiene 25 años), cantan como los ángeles. No pudieron sonar mejor y uno de los momentos cumbres fue esa maravilla llamada «Mykonos», que nos encogió a todos el corazón y que es sin duda alguna una de las mejores canciones de la pasada década. Punto pelota. Claro que aún vendría «White Winter Hymnal», una joya que ya va camino de convertirse en algo tan navideño como ver «¡Qué Bello Es Vivir!». Robin Pecknold se mostró muy agradecido con el público, como demostró con su frase Thanks, you’re awesome. Algo más de una hora de concierto en terreno celestial.

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Lo que vino a continuación más valdría olvidarlo. Conscientes de que no podíamos estar en todas partes, decidimos renunciar a ver a Grinderman (al jodido Nick Cave, sí), pensando que los Thirty Seconds to Mars iban a estar a la altura y darían un gran espectáculo.

Lo primero que nos extrañó fue llegar al escenario Optimus y ver que nada se proyectaba en las pantallas. No había nadie para controlar la cámara que mostraría las imágenes del grupo en directo y sobre el escenario seguían las 4 mismas cruces con luces que estaban allí al comienzo de la tarde. Sobre el escenario ningún movimiento y el tiempo comenzaba a pasar. Aún así, la gente no parecía muy impaciente. Hasta casi una hora después no apareció nadie de la organización y, cuando lo hizo, dio pocas explicaciones. Agradeció al público la paciencia y dijo que habría concierto. Claro que hasta mucho tiempo después no nos enteramos de que el viernes nadie se había subido antes al escenario Optimus, aparentemente por problemas técnicos. Se suspendieron 3 conciertos: los de Klepht, The Pretty Reckless y You and Me at Six. Explicaciones, ninguna. Devoluciones o disculpas, todavía menos.

Ni siquiera se dieron prisa en llevarse las cruces y montar el escenario para los Thirty Seconds to Mars. Al final salieron con hora y media de retraso y hubiese sido mejor que no saliesen. Su espectáculo fue verdaderamente bochornoso y lamentable. Además de la prepotencia con que Jared Leto salió a escena (eso podía esperármelo), lo grave era lo mal que cantaba. Se olvidaba las letras y ponía el micrófono al público, no entonaba… Comenzaron con «Kings and Queens» y las proyecciones de sus videoclips en el escenario. Esperamos un rato a ver si la cosa mejoraba, pero nada. Ni «A Beautiful Lie», ni «Attack», ni «This Is War» sonaban ni de lejos como en sus discos. En ocasiones parecía que fuesen una especie de nuevos Milli Vanilli. Un timo en toda regla. Y es una pena porque les tenía algo de respeto, cosa que ya no. En mi vida me había salido de un concierto de un grupo que me gustase, pero en esta ocasión no me quedó más remedio. Era el único modo de que, al menos, cuando hayan pasado un par de meses pueda volver a escuchar sus canciones, aunque jamás vuelva a ir a uno de sus conciertos.
Dado que aún no sabíamos con certeza si tocarían The Chemical Brothers, nos volvimos a casa. Una pena, porque creo que los de Manchester sí que no defraudaron.

Un comentario en «Optimus Alive ’11 (viernes 8 de julio)»

  • Who is Glassjow? We respect your opinion but is wrong to affirm a lie.

    We really want to change your opinion about us soon. Thank you to contribute for our progress, is very important for us to know what the people think about our band.

    @massayrock

    Respuesta

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